El Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (SENASA) ha tomado la histórica decisión de permitir el ingreso de asado con hueso al sur de la barrera sanitaria de la Patagonia. Esta medida, que ha generado un amplio debate, busca facilitar el acceso a productos cárnicos en una región que ha estado históricamente aislada de ciertos tipos de carne debido a preocupaciones sanitarias.

La autorización ha sido recibida con entusiasmo por algunos sectores, que ven en ella una oportunidad para diversificar la oferta de alimentos en la región. Sin embargo, también ha suscitado críticas entre productores y ganaderos locales, quienes temen que esta apertura pueda poner en riesgo la sanidad animal y la calidad de la carne producida en la Patagonia.

Los detractores argumentan que la entrada de carne con hueso podría introducir enfermedades que afecten tanto a la fauna silvestre como al ganado local, lo que podría tener consecuencias devastadoras para la industria ganadera de la zona. Además, la medida podría alterar el equilibrio del mercado, favoreciendo a productos externos en detrimento de la producción local.

A medida que la noticia se difunde, se espera un intenso debate entre las autoridades sanitarias, los productores y los consumidores sobre los riesgos y beneficios de esta nueva normativa. La comunidad ganadera está en alerta, esperando que se tomen las medidas necesarias para proteger su sector ante esta nueva realidad.

Fuente: Bichos de Campo